Al igual que la activación, germinar las semillas tiene por objetivo liberar los nutrientes contenidos en ellas y además hacer más fácil la digestión al consumirlas. La germinación además aumenta muchos de los nutrientes principales en los granos y en ciertas situaciones es posible generar elementos naturales ausentes en las semillas secas.
* Hay alimentos que son alérgenos como el gluten (proteína presente en trigo, avena, cebada y centeno) que disminuyen su capacidad de producir sensibilidad al estar los granos germinados.
* En cuanto a las proteínas presentes en los cereales se vuelven de más fácil absorción y además se forma lisina (aminoácido) ausente en granos sin germinar.
* El proceso de germinado aumenta la concentración de vitamina E, provitamina A y el complejo B.
* Los minerales se unen a moléculas orgánicas que favorecen su absorción (quelación) y ocurre solo cuando hay germinación.
* En algunos cereales -como la cebada- al germinarlas durante 5 días, se aumenta la fibra de 3,75% a 6%
Recordá que para germinar es necesario hacerlo con semillas adecuadas, por lo tanto deben ser semillas para germinar (que no hayan estado tostadas). Si son semillas de agricultura ecológica, sin pesticidas ni manipulaciones genéticas, tanto mejor!
¡El método de germinación es importante! Para semillas mucilaginosas ( berro, albahaca, mostaza, rúcula y lino) es conveniente hacerlo en platos de germinación en donde las semillas se extienden sobre una rejilla -en la que debajo hay un envase con agua- para que mantengan la humedad. Además las semillas no deben estar amontonadas. Para otras semillas es posible usar tarros, frascos o germinadores eléctricos.
¡Ni tanto, ni tan poco! La cantidad de humedad es fundamental para que las semillas no se
pudran ni se sequen, por lo tanto los germinadores deben drenar bien. Además tenés que procurar que tu germinación tenga buena aireación.
La limpieza siempre es saludable. Realizar con frecuencia una buena limpieza a los germinadores es una excelente decisión porque en los mismo hay proliferación de bacterias. Por esta razón entre germinación y germinación es necesario limpiar muy bien las bandejas o elementos que utilices.
Lo tibio es lo adecuado. Si la temperatura ambiente, en donde pones los germinadores, es fría las semillas no crecerán o lo harán en forma muy lenta. En cambio si los ambientes son muy cálidos puede haber mucho crecimiento de hongos.
Lic Perla Manera Lic Alejandra Volpatti
